Al leer la Biblia cada día, permita que las Escrituras le hablen. Aquí tiene algunos consejos:
Antes de comenzar su lectura ore a Dios pidiéndole que él le hable por su Palabra.
Busque un lugar tranquilo y lea el texto con atención.
Hágase ciertas preguntas: ¿Por qué escribió Dios esto? ¿Qué me quiere enseñar? ¿Cómo lo puedo aplicar a mi vida?
Ore al Señor pidiéndole que le dé el poder para poner en práctica lo aprendido.
Capítulo 10
1Hermanos, el deseo de mi corazón, y mi oración a Dios por los israelitas, es que lleguen a ser salvos. 2Puedo declarar en favor de ellos que muestran celo por Dios, pero su celo no se basa en el conocimiento. 3No conociendo la justicia que proviene de Dios, y procurando establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios. 4De hecho, Cristo es el fin de la ley, para que todo el que cree reciba la justicia. 5Así describe Moisés la justicia que se basa en la ley: "Quien haga estas cosas vivirá por ellas."* 6Pero la justicia que se basa en la fe afirma: "No digas en tu corazón: '¿Quién subirá al cielo?'* (es decir, para hacer bajar a Cristo), 7o '¿Quién bajará al abismo?' "* (es decir, para hacer subir a Cristo de entre los muertos). 8¿Qué afirma entonces? "Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón."* Esta es la palabra de fe que predicamos: 9que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. 10Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo. 11Así dice la Escritura: "Todo el que confíe en él no será jamás defraudado."* 12No hay diferencia entre judíos y gentiles, pues el mismo Señor es Señor de todos y bendice abundantemente a cuantos lo invocan, 13porque "todo el que invoque el nombre del Señor será salvo".* 14Ahora bien, ¿cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán si no hay quien les predique? 15¿Y quién predicará sin ser enviado? Así está escrito: "¡Qué hermoso es recibir al mensajero que trae* buenas nuevas!" 16Sin embargo, no todos los israelitas aceptaron las buenas nuevas. Isaías dice: "Señor, ¿quién ha creído a nuestro mensaje?"* 17Así que la fe viene como resultado de oír el mensaje, y el mensaje que se oye es la palabra de Cristo.* 18Pero pregunto: ¿Acaso no oyeron? ¡Claro que sí! "Por toda la tierra se difundió la voz de ellos, y sus palabras hasta los confines del mundo."* 19Pero insisto: ¿Acaso no entendió Israel? En primer lugar, Moisés dice: "A ustedes yo mismo los pondré celosos con una nación que no es nación; los provocaré a enojo con una nación insensata."* 20Luego Isaías se atreve a decir: "Dejé que me hallaran los que no me buscaban; me di a conocer a los que no preguntaban por mí."* 21En cambio, respecto de Israel, dice: "Todo el día extendí mis manos hacia un pueblo desobediente y rebelde."*Capítulo 11
El remanente de Israel
1Por lo tanto, pregunto: ¿Acaso rechazó Dios a su pueblo? ¡De ninguna manera! Yo mismo soy israelita, descendiente de Abraham, de la tribu de Benjamín. 2Dios no rechazó a su pueblo, al que de antemano conoció. ¿No saben lo que relata la Escritura en cuanto a Elías? Acusó a Israel delante de Dios: 3"Señor, han matado a tus profetas y han derribado tus altares; sólo yo he quedado con vida, y están tratando de matarme."* 4¿Y qué le contestó la voz divina? "He apartado para mí siete mil hombres que no han doblado la rodilla ante Baal."* 5Así también hay en la actualidad un remanente escogido por gracia. 6Y si es por gracia, ya no es por obras; porque en tal caso la gracia ya no sería gracia.* 7¿Qué concluiremos? Pues que Israel no consiguió lo que tanto deseaba, pero sí lo consiguieron los elegidos. Los demás fueron endurecidos, 8como está escrito: "Dios les dio un espíritu insensible, ojos con los que no pueden ver y oídos con los que no pueden oír, hasta el día de hoy."* 9Y David dice: "Que sus banquetes se les conviertan en red y en trampa, en tropezadero y en castigo. 10Que se oscurezcan sus ojos para que no puedan ver, y se encorven sus espaldas para siempre."*La salvación de los gentiles
11Ahora pregunto: ¿Acaso tropezaron para no volver a levantarse? ¡De ninguna manera! Más bien, gracias a su transgresión ha venido la salvación a los gentiles, para que Israel sienta celos. 12Pero si su transgresión ha enriquecido al mundo, es decir, si su fracaso ha enriquecido a los gentiles, ¡cuánto mayor será la riqueza que su plena restauración producirá! 13Me dirijo ahora a ustedes, los gentiles. Como apóstol que soy de ustedes, le hago honor a mi ministerio, 14pues quisiera ver si de algún modo despierto los celos de mi propio pueblo, para así salvar a algunos de ellos. 15Pues si el haberlos rechazado dio como resultado la reconciliación entre Dios y el mundo, ¿no será su restitución una vuelta a la vida? 16Si se consagra la parte de la masa que se ofrece como primicias, también se consagra toda la masa; si la raíz es santa, también lo son las ramas. 17Ahora bien, es verdad que algunas de las ramas han sido desgajadas, y que tú, siendo de olivo silvestre, has sido injertado entre las otras ramas. Ahora participas de la savia nutritiva de la raíz del olivo. 18Sin embargo, no te vayas a creer mejor que las ramas originales. Y si te jactas de ello, ten en cuenta que no eres tú quien nutre a la raíz, sino que es la raíz la que te nutre a ti. 19Tal vez dirás: "Desgajaron unas ramas para que yo fuera injertado." 20De acuerdo. Pero ellas fueron desgajadas por su falta de fe, y tú por la fe te mantienes firme. Así que no seas arrogante sino temeroso; 21porque si Dios no tuvo miramientos con las ramas originales, tampoco los tendrá contigo. 22Por tanto, considera la bondad y la severidad de Dios: severidad hacia los que cayeron y bondad hacia ti. Pero si no te mantienes en su bondad, tú también serás desgajado. 23Y si ellos dejan de ser incrédulos, serán injertados, porque Dios tiene poder para injertarlos de nuevo. 24Después de todo, si tú fuiste cortado de un olivo silvestre, al que por naturaleza pertenecías, y contra tu condición natural fuiste injertado en un olivo cultivado, ¡con cuánta mayor facilidad las ramas naturales de ese olivo serán injertadas de nuevo en él!La restauración de Israel
25Hermanos, quiero que entiendan este misterio para que no se vuelvan presuntuosos. Parte de Israel se ha endurecido, y así permanecerá hasta que haya entrado la totalidad de los gentiles. 26De esta manera todo Israel será salvo, como está escrito: "Vendrá de Sión el libertador, que apartará de Jacob la impiedad. 27Y éste será mi pacto con ellos cuando perdone sus pecados."* 28Con respecto al evangelio, los israelitas son enemigos de Dios para bien de ustedes; pero si tomamos en cuenta la elección, son amados de Dios por causa de los patriarcas, 29porque las dádivas de Dios son irrevocables, como lo es también su llamamiento. 30De hecho, en otro tiempo ustedes fueron desobedientes a Dios; pero ahora, por la desobediencia de los israelitas, han sido objeto de su misericordia. 31Así mismo, estos que han desobedecido recibirán misericordia ahora, como resultado de la misericordia de Dios hacia ustedes. 32En fin, Dios ha sujetado a todos a la desobediencia, con el fin de tener misericordia de todos. 33¡Qué profundas son las riquezas de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Qué indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos! 34"¿Quién ha conocido la mente del Señor? ¿O quién ha sido su consejero?"* 35"¿Quién le ha dado primero a Dios, para que luego Dios le pague?"* 36Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén.
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